Jordi (15) se traslada con su madre (Júlia) en Barcelona, después de la muerte del padre. En el nuevo instituto, Nacho (17) transforma su vida en un infierno. Solo se comunica con Ania -víctima también del asedio- por quien tiene un afecto especial, y con un ex policia (Bruno) de vida destrozada. Ania está a punto de perder la vida como consecuencia de su asedio. Ante la grave situación de Ania, Jordi reacciona imprevisiblemente. Bruno tratará de ayudarlo, pero Jordi, asustado de volver a enfrentar-se con su asediador, escogerá un camino que como mínimo sirva de alguna cosa.