El mestre que va prometre el mar se adentra en la vida de Antoni Benaiges, un maestro de Mont-roig del Camp, en el Baix Camp, que en 1935 es destinado a la escuela pública de Bañuelos de Bureba, un pequeño pueblo de la provincia de Burgos. Poco a poco, y gracias a una metodología de enseñanza pionera y revolucionaria para la época, empezará a transformar la vida de sus alumnos, pero también la del pueblo, lo que no siempre resulta del agrado de todos.
El filme se ha rodado en Ametlla del Vallès, Barcelona, Gualba, Llinars del Vallès (Parc de Montnegre i Corredor), Mura, Vilanova i la Geltrú y Burgos.