Davide y su hermano Loris viven acomodados en una pequeña ciudad italiana, donde no pasa nada extraordinario. Davide decide acompañar a su hermano a ver un partido del Inter de Milán contra el Barça, aunque el fútbol no le interesa demasido. En Barcelona, Davide conecerá un chico, Andy, que le hará cambiar su concepto de la vida. Éste le convence de irse a Chile con él, donde conocerá la verdadera vida de Andy, muy ligada al ecologismo militante, hecho que le hará ver el mundo con otros ojos.