Tras cinco años en la cárcel por atropellar borracho a un hombre, Mark Rodríguez disfruta de su primer fin de semana de permiso. Lo que se antojaba como unos días de disfrute de la libertad se convierte en una auténtica odisea al ser testigo de un atraco a un furgón blindado.
Rodada en: Terrassa, Arenys de Munt, Salou, La Vall de Boí.